Erika Gonzalez Valenzuela
, dirigente gremial de FENATS Unitaria Ñuble pone hoy en orden sus pendientes para acceder a la merecida jubilación que cuenta entre sus más grandes méritos haber sido una de las principales impulsoras de la Ley N°21643, más conocida como la Ley Karin. Junto a Claudia Salgado -hermana de Karin Salgado la técnico en enfermería que sufrió acoso laboral y fue empujada a quitarse la vida- Erika González dio una batalla infatigable con todas las herramientas del liderazgo sindical para que hoy la Ley Karin defienda a todos los y las trabajadoras del país.

Recientemente en la Asamblea XXIII de la Confederación FENATS Unitaria realizada en La Serena, tuvo lugar un emotivo homenaje a la carrera de Erika González quien, antes de dejar sus labores definitivamente, compartió con sus compañeros de todo el país que le entregaron un saludo fraterno, flores y escucharon con gran atención los nuevos proyectos de la dirigenta gremial del Hospital Clínico Herminda Martín de Chillán. En un especial momento, la directora y encargada de género de la Confederación FENATS Unitaria, Myriam Molina realizó una presentación sobre la importancia del trabajo de González y una panorámica sobre el influyente legado que deja su trabajo sindical no solo como representante de los trabajadores y trabajadora, sino como la encargada de trazar una raya en la arena sobre el límite del maltrato laboral y sus consecuencias, como sucedió en el caso de Karin Salgado.

Por su parte, Erika González expresó toda su esperanza de que esta lucha por los derechos de las personas víctimas de abuso se extienda con un modelo más específico al sector de la salud abarcando no solo hospitales y otros centros asistenciales. En la ocasión también alentó a los socios/as más jóvenes que se integran al mundo laboral aprovechando estos nuevos aires de cambios, cuidándolos y fortaleciéndolos para el mejoramiento del ecosistema laboral y social tanto para funcionarios como pacientes.

“Si algo pudo mostrarnos Karin con su sacrificio es que si bien en todos los servicios de salud se ha vivido históricamente este tipo de acoso, el maltrato en general ocurre en todos los espacios de trabajo. Esta ley sacó el tema de su espacio de realidad oculta que era donde radicaba su poder. Pudimos sacarlo a luz pública y desde ahí seguir perfeccionando el actuar de la justicia. Ha sido difícil y ha tenido sus costos, pero al menos hemos encontrado ayuda en el camino. Hemos recorrido distintos hospitales a lo largo de todo Chile para que la gente conociera la ley y cómo poder sacarle un buen provecho para ayudar a colegas que están pasando por un momento crítico ahora", destacó.

“Ttodos tenemos una responsabilidad muy grande también en el trabajo para erradcar el maltrato. Ha sido difícil difundirlo pero hemos tratado de llegar a todo Chile para que la gente conozca su derecho y las alternativas que otorga la Ley Karin para poder sacarle un buen provecho y seguir ayudando a las colegas que están pasando por un momento crítico”, planteó González. “Y en caso de ser testigos de un acto de acoso o estar sufriendo esto en el trabajo, siempre hay que tener buena comunicación con su gremio o acercarse a alguna autoridad del servicio para dar a conocer lo que ahora está pasando porque siempre es una tragedia vivir algo así y trabajar en esas condiciones”, reflexiona.

La Ley Karin, nombrada en honor a Karin Salgado, técnica en enfermería que sufrió acoso laboral, es un hito en la legislación chilena por su enfoque integral en la prevención, investigación y sanción de estas conductas, aplicable tanto al sector público como privado. La ley también enfatiza la importancia de un ambiente laboral libre de violencia, con un enfoque en la dignidad y perspectiva de género.